COACEL Y SU TRABAJO EN RED EN PANDEMIA.

La Corporación de Apoyo al Celíaco (Coacel) ha estado apoyando activamente a la comunidad de celíacos y otras personas que deben mantener un tratamiento con dieta libre de gluten, mediante diversas actividades. En coordinación desde el teletrabajo pudimos organizarnos  y ampliar cobertura  por medio de nuestras redes sociales. Así, nos hemos acomodado a los nuevos requerimientos pasando, por ejemplo, de  los tradicionales talleres de cocina presencial de los días sábados a talleres virtuales siempre gracias al apoyo de las empresas, o bien entrevistas a profesionales que aporten al cómo vivir esta nueva realidad cuando un miembro de la familia debe llevar una alimentación diferente.

Identificamos dos grandes cambios asociados a la pandemia junto a la crisis sanitaria y social. El primero fue el aumento del  número de mensajes a las redes sociales de Coacel solicitando ayuda por atención médica y nutricional, lo que hemos atendido con el equipo de Coacel dentro de nuestras posibilidades y recurso tiempo (médico gastroenterólogo y nutricionista). El segundo fue el surgimiento de la necesidad de ayuda alimentaria; por un lado  muchas personas en estado de necesidad  que pedian ayuda y por otro, personas y empresas ofreciendo cooperar, pero que no sabían, ni podían hacerse cargo de la operación. La pregunta estaba ahí en todas las redes: ¿quién se haría cargo de emprender este movimiento, de la situación difícil que estaban pasando tantas familias que no eran consideradas dentro de las diversas ayudas alimentarias dirigidas a la población general? A este aspecto hemos dedicado buena parte de nuestros esfuerzos.

En junio se inició una campaña piloto para acudir con ayuda alimentaria de emergencia –Red Sin Gluten de Ayuda  Alimentaria de Emergencia-. En nuestro sitio web se publicó objetivo y alcances de la campaña piloto, un botón de donación en dinero y un formulario de inscripción para las personas que solicitaban ayuda alimentaria y debian marcar los documentos que tenian para acreditar dicha información. Posteriormente se les solicito  documentar su diagnóstico y situación socioeconómica. Para las familias que se encontraban en extrema necesidad dentro de la R.M, nos coordinamos con Productos El Pueblo, fueron directamente a los domicilios de seis familias con más de un miembro celíaco, esta ayuda fue  permanente, cooperando con una canasta grande de alimentos dos veces al mes para cada familia. Para grupos de regiones, la colaboración de My Foods, Celicias , Mizos y PF Alimentos, permitió enviar ayuda a las Asociaciones de Celíacos de San Antonio y Chillán. Paralelamente, se inició un programa de ayuda mayor con la empresa Nutrisa, que donó una gran cantidad de alimentos a través de la ley 16.282, que permite la donación en especies en estado de catástrofe. Gracias  a Nutrisa se pudo llegar con un pack de alimentos a 100 familias, estas familias fueron todas las que enviaron la documentación que acreditaba la necesidad de tratamiento médico con dieta sin gluten y documentos de su situación socioeconómica. Organizar la difusión, la logística de solicitud, revisión y recepción de documentos, así como la entrega, fue compleja, nos tomo mucho tiempo.

Gracias  al compromiso de los mismos beneficiarios, se organizo un sistema de encargados zonales comunales y se elaboro el Instructivo Voluntarios (VER ACÁ) para manipular y armar los PACKRED SinGluten , de esta menera  recibieron al camión con las cajas y armaron los pack. 
Posteriormente fue otra voluntaria que contaba con salvoconducto para toda hora y lugar a retirar esos pack al domicilio de los 10 encargados para comenzar a realizar los despachos a domicilio, comunas que se encontraban muy alejadas  unas de otras, dentro de la región Metropolitana. Estos despachos a domicilio y envíos a regiones se pudieron hacer gracias a las donaciones  monetarias que se reunieron para financiar esta operación. Creemos que hemos hecho un buen trabajo.

Después de esta entrega, aumentaron nuevamente los mensajes solicitando, y algunos exigiendo, ayuda alimentaria. Eso nos obliga a aclarar una vez más que Coacel, en sus más de 30 años de trabajo nunca ha contado con ingresos directos o de otro tipo por parte del Estado ni otras entidades públicas. Nuestra labor tiene alta demanda y en ocasiones como la actual las necesidades son claramente mayores que las que podemos cubrir. Es el momento de enfatizar que se necesita aunar esfuerzos, tanto por parte de aquellos que producen alimentos sin gluten seguros, que deben aprender a donar, como de las personas que deben aprender a aportar horas de trabajo voluntario. Nuestra disposición a trabajar sigue intacta y esta sería la mejor manera de mejorar la capacidad de ayuda que tenemos.

Por ahora estamos tratando de apoyar a los grupos regionales, de manera que esta crisis también sea un impulso para el trabajo colaborativo entre pares de una misma región, provincia, o comuna. Que la población que sigue una alimentación sin gluten sienta la necesidad de aprender a trabajar en grupo, en comunidad. De solucionar de forma cooperada y Coacel siempre será el Buen Vecino que apoya desde su lado técnico. 
Si formas parte de un grupo formalizado y quieres organizar una red de ayuda en tu región, puedes escribir al formulario de contacto de Coacel, encantados podemos ayudar. CONTACTO.

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